Llegamos al relato de lo vivido el sábado, y llegamos al más corto, ya que un servidor, en una mezcla de cansancio, desgana y apatía, no disfruto del día como es debido, ya he contado una y otra vez, que no me gustan los festivales, y eso, se me va notando según pasan los días. Pero eso no quiere decir que me encerrara a no ver a nadie, tan solo, no se me ocurrió ir al recinto a intentar ver la mayoría de grupos posibles, mi objetivo, Lynyrd Sknyrd, después, ya se vería.
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| Foto; Rachel |
Comencé el día, como no, en la plaza de La Virgen Blanca, donde actuaba una banda de rockabilly que ya lo hiciera el viernes por la noche, y yo no había visto, pero se me avisaba que la montaron bien en la noche, que son una fiesta, que merecía la pena. Y a pesar del sol, que nos quemo ligeramente la cara, allí nos plantamos. Dick Brave & The Backbeats nos ofrecen una serie de versiones, sacadas de todos los géneros imaginables, pop, rock, soul, punk, blue, llevándolas todas ellas hacia el sonido de los 50, hacia el rockabilly, tanto en estilo, como en actitud, como en estética. El cantante, según he podido leer, es un actor alemán, que además lleva una temporada en la música, pasando tanto por el rock como el pop. Ya salieron un grupo similar, The Baseballs, no quiero comparar, simplemente te recuerda. Pero para nada, por mucho que salga la palabra “pop”, “actor”, “alemán”, quiere decir que va a ser un numerito frio y para casa. No, estos chicos salen a montar la fiesta, la juerga, animar, el cantante no solo hace su función bien, también conecta genialmente con el publico, con mucho humor, con mucha actitud, y la banda suena genial, sin complicaciones, rock and roll a saco, y van desgranando temas, que algunos conocemos por las radio formulas, pero que cuando las atacan ellos, no puedes evitar recordar los 50 y comenzar a moverte sin mas remedio, y os repito que estábamos a medio día al sol! Momentazo, en serio, y además, me informaron que la noche anterior estuvieron mejores, mas cañeros, mas salvajes sobre las tablas, habrá que tomarles la matricula.
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| Foto; Mr. Sabbath |
Agotarte tan pronto no es buena idea, y lo dicho, no exprimi el sábado ni un poquito, me dirigi al recinto tan solo para acceder al escenario Levon Helm y ser Southern By The Grace Of God por un dia………….
LYNYRD SKYNYRD 21:20h
Sabemos de sobra que ya no estamos ante LS propiamente dicho, solo Gary queda de los originales, y la polémica sobre si utilizar el nombre o no esta servida cada vez que el nombre de la banda sale a relucir. Pero si debo decir que como ya he comprobado dos veces, los que ahora están, lo hacen maravillosamente, son profesionales, tienen presencia, suenan de maravilla y se nota el respeto por la banda sureña. Y recordar de Medlocke, Cartellone o Johnny, ya llevan mucho tiempo defendiendo los colores de la banda. Y todo ello se nota dando un resultado muy compacto, muy eficiente. Además del setlist, con un solo guiño a tiempos actuales, con “Skynyrd Nation” de su último disco, tema que yo creo quieren convertir en himno de sus conciertos. El resto, clásico tras clásico, como si de un greatest hits se tratara, haciendo una apuesta más que segura, el éxito garantizado por supuesto.
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| Foto; Mr. Sabbath |
Pero por razones que desconozco, el tiempo sobre el escenario se quedo en una hora mas menos, muy poco para una banda que visita tan poco nuestro país, una hora que nos supo a poquísimo a la mayoría, pero que también hizo que no hubiera momentos de parón o bajón, llegaron, fueron al lio y se marcharon. Cuando sonaban las notas de “Call Me The Breeze” ya sabes que se acerca el final, aunque sigue siendo una juerga esta versión de JJ Cale que hacen los Lynyrd, que como es habitual dio paso a “Sweet Home Alabama”, momento canticos del publico, (todos la conocemos, tanto propios como extraños), y marcha del escenario y luces apagadas para volver como no, al fin de fiesta con “Free Bird”con el dibujo de fondo de un águila portando una bandera, donde en las nueves de la ilustración se podía leer los nombres de la familia Skynyrd ya caída, ya sabemos que los sureños son mucho de estos homenajes. Y poco más, es un temazo, mas de diez minutos inolvidables, pero insisto, se esperaba mas tiempo de esta banda, un show de que menos 90 minutos, no se si es cosa de la banda, de la organización, o vete tu a saber, pero, se lo podían hacer mirar. No me gustan los festivales…………
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